Fundación

BREVE HISTORIA

Nace como un sentimiento unitario y es continuidad de la lucha de nuestro pueblo por sus derechos políticos y sociales. Tiene el pecado original de haber nacido en las raíces profundas del pueblo andino-amazónico y costeño, donde las heridas históricas están vivas; ahí, donde la exclusión y el atraso son el pan de cada día; donde el Estado brilla por su ausencia; ahí donde los políticos llegan tan sólo cuando hay elecciones. Nació bajo el lema, por la conquista del «pan con dignidad» por que para nosotros todo logro personal es en base al esfuerzo honesto. En Cachicadán, que en el argot popular decimos «es la tierra donde todo peregrino se le da su buen pan, con aroma a eucalipto y sabor a panizara” bajo la conducción espiritual de compañero de siempre Alfonso Barrantes Lingán y liderazgo innato de Pedro Cenas Casamayor, «El caminante” oriundo del lugar, de la Provincia de Santiago de Chuco, tierra de honestos patriotas hoy en la inmortalidad como son nuestro poeta universal, Cesar Vallejo Mendoza y Luis la Puente Uceda, nació para vivir el proyecto integración, el 10 de Abril del año 2000.

Decidimos apartarnos de las ataduras de la vieja clase política, en particular de las cúpulas que sostienen y defienden privilegios que los da el estado viejo, poniéndose de espaldas al Perú real y continuar con la obra de ilustres compatriotas como César Vallejo, Jorge Basadre, José María Arguedas, Gustavo Mhome LLona, Alfonso Barrantes Lingán, entre otros. En una asamblea bajo el sol radiante con la libertad que nos da la madre naturaleza, se redacto el «Acta Andina» Acta de fundación. Bajo el lema POR LA INTEGRACIÓN DE LOS PUEBLOS se delegó la conducción política, a Pedro Cenas Casamayor. Luego de dos años de trabajo se hizo un alto para llevar a cabo el Primer Plenario denominado «Por la integración social del Perú», en Cachicadán, donde se perfeccionó la táctica y estrategia política para concluir la primera etapa. Luego de 3 años de trabajo logramos juntar las firmas necesarias de adherentes. Nuestro caminar en la búsqueda de adherentes por todo el país, nos permitió conocer el Perú real; nos permitió reencontrarnos con muchísimos amigos, compañeros y hermanos en la fe, que de manera permanente combaten la injusticia, logrando registrarnos en el 2004.

Las fiestas costumbristas, los cumpleaños en los campos, los festivales deportivos, las cadenas integracionistas, las rifas populares, etc., entre otras, acciones propias de la creatividad popular, son testigos de nuestro accionar por conseguir un adherente para nuestra inscripción en el Jurado Nacional de Elecciones. La gran red de regidores en todo el país que nuestro presidente del partido, Economista PEDRO CENAS CASAMAYOR, construyo en la década de los 90, siendo Regidor en la comuna de Magdalena del Mar, luego de fundar la Asociación Nacional de Regidores del Perú – ANREP, fue decisiva. Una vez terminada la primera etapa, vendría la segunda relacionada con la adecuación a la Ley de Partidos Políticos.

En el 2006. Competimos en las elecciones Presidenciales y posteriormente participamos en las Elecciones Regionales ese mismo año. En Puno ganamos, a los pocos meses de gestión el presidente regional en ese entonces fue expulsado de nuestra organización al haber abandonado los principios del partido y por conducta autoritaria y antidemocrática. Para nosotros el trabajo político es continuidad. Nuestros congresos partidarios del 2011 y 2012 reafirman nuestro compromiso con el país y también consolidan nuestro trabajo para conseguir nuestro registro en el JNE. En diciembre del 2015 alcanzamos el mínimo de firmas exigidas y en mayo del 2017. alcanzamos nuestra inscripción definitiva con R.083-2017-DNRO-JNE, luego de mas de 4 años de trabajo permanente por los nuevos caminos del Perú, dejamos demostrando una vez más que los peruanos de a pie, que provenimos del Perú profundo, ahí donde el primer beso es para siempre, ahí donde nos nutrimos con semillas naturales, ahí donde se obtiene el pan con dignidad, ahí donde la chochoca, el chambar, el rocoto relleno, el chairo, el rico juane, la cecina, la rica pachamanca, el cau cau etc. nos dan buena fibra, para trabajar por el bien común, ahí donde la justicia para el pobre no existe, ahí donde somos denunciados por un periodicaso y muchas veces sentenciados sin pruebas solo por criterios de conciencia. Nunca estamos cansados, menos fatigados, siempre estamos despiertos y energizados, dispuestos a dar la batalla por la limpieza moral del Perú, para recuperar el Perú para los peruanos.

Que este sacrificio de muchísimos conciudadanos integracionistas, que harían una lista muy larga de enumerar, se convierta en la fibra lúcida y herramienta eficaz e indispensable para hacer realidad el gran sueño peruano, lograr nuestra integración, política, cultural, económica y social para «ser potencia mundial».